domingo, 12 de mayo de 2013

LAS TICS EN LA ERA DIGITAL

LAS TICS EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR

El mundo como lo conocemos gira en torno a todas las aplicaciones que nos permite usar el ciberespacio que es ilimitado. El Internet se ha convertido en el medio más utilizado en el mundo económico y el más idóneo para impartir una enseñanza de calidad y progreso.
Por otra parte, la invención del ordenador que se presenta ahora en un dispositivo cada vez más compacto, práctico y accesible a la mayoría, nos facilita posibilidades impensables hace algunos años: la integración de las conocidas tecnologías como el audio, el vídeo, el teléfono, el correo, la máquina de escribir, etc. unido a la creación de redes sociales, espacios virtuales, programas con múltiples aplicaciones gratis accesibles en la red, han revolucionado la forma de vida de las personas. Este es el mundo de hoy.
Toda esta innovación tecnológica se ha traslado a la educación, provocando cambios estructurales y curriculares. El deber de la Universidad como ente formador para el progreso es adecuarse a los cambios que exige el devenir del mundo globalizado. La educación convencional se ha desplazado a escenarios virtuales, generando así, más oportunidades a quienes antes, no podían asistir a una educación superior tradicional.
Vivimos en una era tecnológica y la Universidad tiene que ajustarse a ello. El hecho de que muchas universidades brinden educación a distancia, realicen proyectos de investigación en el área de comunicaciones y en el mundo virtual y enfaticen en el uso de la computadora, no significa que estén respondiendo verdaderamente al desafío que exige toda esta revolución tecnológica. Esta institución debe ajustar su estructura y manejo para permitir el acceso del uso de las NTIC (Nuevas Tecnología de la Información y comunicación) en las aulas de clase, de esta forma se asegura que haya un crecimiento cónsono de investigación y aplicación en el propio campo educativo. En otras palabras, debe implicarse en procesos de mejora de calidad para permitir que los docentes tengan todo lo necesario para incorporar las NTIC en su quehacer diario. Sin embargo, el hecho de que la universidad tenga acceso limitado a los laboratorio de informática, o de que el espacio físico destinado para este fin no sea el adecuado, no es impedimento para que los docentes implementen el uso de tecnología para enseñar. Una de cada dos personas tiene una computadora o acceso a ella o a un dispositivo de acceso a la red. Sin embargo, aunque la nueva generación se mueve en este ámbito continuamente, muchos docentes no han desarrollado las competencias tecnológicas necesarias para enfrentar a este nuevo siglo. Al respecto de las potencialidades que ofrece esta nueva era, señala Cabero (2000):
(…) posibilidad de crear entornos multimedia de comunicación, utilizar entornos de comunicación sincrónicos y asincrónicos y poder, de esta forma, superar las limitaciones espacio-temporales que la comunicación presencial introduce, deslocalizar la información de los contextos cercanos, facilitar que los alumnos se conviertan en constructores de información, construir entornos no lineales sino hipertextuales de información donde el estudiante en función de sus intereses construya su recorrido, propiciar la interactividad entre los usuarios del sistema, actualizar de forma inmediata la información, o favorecer la creación de entornos colaborativos para el aprendizaje.” (p.214)
Todas estas innovaciones están allí para ser explotadas. Si el deber de la universidad es formar individuos preparados para enfrentar las exigencias del mundo actual, debe entonces potenciar el uso de toda esta tecnología en los salones de clase. Más ahora, que el uso o posesión de un ordenador era un impedimento en el pasado. Ahora es posible que la mayoría tenga acceso a este dispositivo. Salinas (1995) aseveraba que el escenario tecnológico y comunicativo se movía en tres ámbitos que permiten el acceso al aprendizaje y la comunicación educativa: aprendizaje en el hogar, en el puesto de trabajo, en un centro de recursos de aprendizaje, y recientemente agregó un cuarto: aprendizaje en cualquier lugar o momento.(p.86) Un ejemplo de ello, lo encontramos en las innovaciones hechas a los celulares, ya no hace falta estar frente a una computadora para revisar un correo electrónico, entrar a una red social o participar en un foro. Es decir, cada día son más las personas con acceso a todos los beneficios que ofrece el internet. Como dice Alonso Gallegos (2003): "En Internet existe el mayor encuentro multicultural y la mayor coincidencia tecnológica de todos los tiempos." (p.76) Entonces, es deber de los centros formadores, explotarlo y preparar a los individuos para sacar el mejor provecho de este recurso.